Como ya dije, yo iba a la Fiesta esencialmente de compras. Así que para comenzar, pensé en qué podría empacar libros, que no fuera imposible de llevar en el Metro. Los libros pesan demasiado, sería difícil para mí poderlos llevar al final del día y debía poderlos llevar en un medio que pudiera caber en un vagón de metro, pues la Fiesta tendría lugar justo frente a la Estación Universidad, en el Jardín Botánico. Así que me decidí por uno de esos carritos de mercado que se halan, de los que tienen un saco. Peeero…vaya y consiga uno de esos. Por alguna extraña razón, los carritos parecían estar agotados en Medellín antes de la Fiesta, así que finalmente me decanté por la vieja confiable: mi morral de la maestría, que resiste el uso y el abuso.
Luego, el transporte. Yo me fui en transporte público. ¿Pero esa vuelta cómo se hace? Pues yo tengo Tarjeta Cívica; pero no la usaba hace años de los años. Y la bendita no me aparecía. Y la buscaba por toooda la casa. Y nada…hasta que por fin, después de veinte minutos de buscar por la casa, la tarjeta apareció.
Descargué la app de la tarjeta, recargué el monedero y pude recargar la Cívica. Peeero justo hoy no dejaba activar el saldo en la app directamente, así que tuve que esperar a la estación. Activé saldo sin problema, me subí al metro hacia el norte con mi morral vacío, y empezó la aventura.
A continuación, algunas recomendaciones para la próxima Fiesta:
Recomendación #1: no corra a comprar. El sitio es grande. Los stands son grandes. Hay libros para rato. Recorra primero todo el Jardín Botánico, para darse una idea de las escalas y las proporciones del lugar. Es mejor caminar temprano, con el morral vacío; que caminar después, cansado y con el morral pesado de libros o de cosas (bolsos, velas, yo qué sé). Así, ya se sabe dónde quedan las cosas y puede ir con calmita.
Recomendación #2: mapa. Siempre pedir o tener a mano un mapa, para orientarse. Eso no es un estorbo; todo lo contrario.
Recomendación #3: hidratación. Hace calor, estamos caminando sin cubierta, y en un momento vamos a tener un morral con libros pesando en la espalda. Lo mejor es estar hidratado; sea que traigamos un termo o que compremos algo.
Recomendación #4: prográmese. Si hay algún evento importante, algo que llame la atención -concierto, conferencia, conversatorio, lanzamiento de libro, evento infantil, taller, etc- lo mejor es inscribirse y programar la llegada a la Fiesta de modo tal que la llegada no vaya en contra del evento al que queremos ir. Como en mi caso yo no quería ir a ninguno de estos eventos, esta última precaución no me aplicaba.
Recomendación #5: no está de más llevar algo de efectivo. Si bien la Fiesta está bancarizada y hasta el vendedor de los pines y los separadores de libros tiene QR de entidades bancarias, me sucedió que fallaron los datáfonos al momento de comprar en una editorial, pues estaban muy recién instalados. Asimismo, el efectivo sirve para comprar las chucherías de afuera de la Fiesta o para comprar cositas pequeñas. Sin embargo, hago la observación de que es como para una emergencia.
Ya sí, a caminar y a disfrutar de esta Fiesta.
Tras unas horas y muchos libros, el morral estaba lleno; y yo estaba exhausta. La Fiesta es gigante (más de lo que uno cree) y yo le di alrededor de unas tres vueltas al evento, mientras iba mirando libros, comparando y comprando. Así que, haciendo algo de esfuerzo, caminé de regreso hasta el metro y me devolví a mi casa. A levantar los pies y a darme un merecido descanso.