Estambul Pass

Hotel Conrad; Estambul, Turquía
¡Por fin tenemos la Estambul Card! Esta tarjeta opera igual que una tarjeta CÍVICA, dando incluso un descuento sobre el uso de los servicios de transporte.
Le veo, sin embargo, una pega: hay que pasar la tarjeta por cada trayecto que se toma; no es por un solo viaje, como en Medellín o Ciudad de México. No obstante, el servicio que presta la tarjeta es excelente pues todos los servicios de transporte público están integrados y articulados con esa tarjeta como sistema de pago.
Aprovecho para hablar del transporte público: es excelente! Estambul es una ciudad que se presta para ser descubierta y explorada gracias a su maravillosa red de transporte público que integra tranvía moderno, tranvía histórico, metro, funicular, buses urbanos y servicio de barcos que cruzan el Bósforo y el Cuerno de Oro con destino a la zona asiática siguiendo rutas preestablecidas.
Es muy importante conseguir un mapa, pues nunca se sabe si aquel lugar que tanta curiosidad suscita es fácilmente accesible en metro o bus. Por hoy, y como se ha vuelto costumbre, bajamos por Barbaros Bulvar (en honor al Navegante) y caminamos la calle Dolmabahçe en una maratón que ya se ha vuelto familiar hasta llegar a la estación del tranvía. Volvimos a Sultanahmet, para conseguir nuestra segunda tarjeta -la Estambul
Pass, donde se activa una “llave” por 3 días que permite el acceso a los principales lugares de la ciudad.
Gracias a él, pudimos conocer nada menos que el Museo Arqueológico de Estambul. Este complejo de varios edificios nos permitió admirarnos ante artefactos de las grandes civilizaciones que hicieron parte del Imperio Otomano y que, en sus tiempos, regalaron tesoros entre los que se incluyen estelas, estatuas y fragmentos de la Puerta de Ishtar a estudiosos de Estambul, la metrópolis de la región.
Conocimos, cerca de allá, la pequeña y encantadora Santa Irene. Cercana a Santa Sofía y a menudo eclipsada por ésta, este pequeño templo cuenta con una arquitectura hermosa y
una acústica de óptima calidad que la convierten en un lugar perfecto para conciertos.
Estuvimos también en el Museo de los Mosaicos. Es pequeño en comparación con otros lugarescercanos y su entrada queda mimetizada un poco en un bazar, pero el tamaño de
los mosaicos y la calidad de la conservación en las escenas que muestra al visitante lo hacen una opción interesante para quien le guste esta forma de arte, de la cual la región que se visita en este viaje es la capital mundial.
This entry was published on August 15, 2014 at 10:51 am. It’s filed under Diario de Viaje, Viaje and tagged , , , , . Bookmark the permalink. Follow any comments here with the RSS feed for this post.

One thought on “Estambul Pass

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