De la lucha contra el patriarcado, cambio radicalmente el itinerario de lecturas y me dirijo a Estambul, en los tiempos de Solimán el Magnífico. Tal es el contexto de “El Arquitecto del Universo”.
La obra es la primera que leo de Elif Shafak, su autora. Espero que no sea la última; ya que disfruté enormemente este libro. Su narrativa es envolvente, el arco de desarrollo de cada uno de los personajes (especialmente de los dos principales, Jahan el Mahout y Sinan el Arquitecto) muy creíble y el final, una bomba completa; que sólo al lector más perspicaz y observador se le ocurriría pensar.
En particular, es interesante leer cómo la autora desarrolla el personaje del elefante. Lo va posicionando como un vehículo a través de la vida de su mahout: como una tabla de salvación, como una montura, como un ayudante, como un amigo, como un cómplice y un escucha en sus historias de amor. Pero también, me llama la atención que la autora haya abandonado la subtrama del Capitán Gareth de forma como tan intempestiva. Como si, haciendo una relectura, hubiera pensado “ya deshagámonos de Gareth, no voy a hacer nada de valor con él, ya sirvió para lo que iba a servir” y ¡puff! no lo leímos más….ni más amenazas, ni más sustos, nada de nada…
El libro está impregnado de amor y de melancolía en cada una de sus letras. Esa melancolía estambulita que hizo famosa Pamuk, que es posible sentir de primera mano en esta ciudad; y que sentí desenvolverse entre las páginas. Pero también de amor; ese que dejaban ver cada uno de los personajes.
Amor por el trabajo; amor por la comunidad; amor por un imperio; amor a la ambición; amor familiar; amor al poder; pero también amor romántico. Amor trágico, amor mudo y amor desinteresado, que se entrecruzan por los pasillos del serrallo y las cúpulas de las mezquitas como si estuvieran en un Juego de las Sillas, y la música estuviera a punto de acabarse para todos. Así se siente leer El Arquitecto del Universo. ¡No dejen de hacerlo!
Through the looking glass 
Me encantan los libros que hablan sobre Estambul, su vida diaria, costumbres…. Es una ciudad que enamora😍😍
¡Somos dos!