Ya les había mencionado mi gusto por las historietas de Tintin; y cómo había empezado a recibirlas como regalo de cumpleaños de mi hermano.
En particular, recibí Tintin y el Arte Alfa y Tintin y el Secreto del Unicornio; que estaban dando por esa época en cine. Pero, aunque quedé con la tuna de hacer la colección completa de las historietas como un guiño a mi infancia, otras necesidades y otras lecturas fueron entrando y tomando ficho prioritario, como decimos en Colombia. Y Tintin se fue quedando atrás, y atrás…
Por eso este año, quisiera retomar esta colección y poder leer completas, como un guiño a mi infancia, las historietas de Tintín. Me puse la meta y comencé por dos episodios de la serie (Las Aventuras de Tintín), que me gustaban mucho cuando pequeña:
El Cetro de Ottokar fue y será siempre mi episodio preferido. El hecho de tener que rescatar un objeto, resolver una trama política, correr contra el tiempo en un país exótico de Europa Oriental…aumenta exponencialmente la adrenalina a la que está expuesta cualquier niña de 8 años. Y la sensación persiste; pues cuando tuve la historieta entre las manos, volví a sentir la misma carga de adrenalina.
Las Joyas de la Castafiore me gusta por varios motivos: primero, porque me recuerda la relación entre la Castafiore y el Capitán; que es para morirse de la risa y que, por supuesto, había olvidado con el paso del tiempo. Segundo, porque en la trama se hace evidente una inculpación a quienes son diferentes, y Hergé hace una especial condena a la xenofobia; pues el misterio -que, como por variar, resuelve Tintin- resulta ser una trama de lo más inocente que habían oscurecido Hernández y Fernández.
Iré publicando más acerca de la colección conforme vaya comprando más ejemplares. Por el momento, la colección va así:
Personalmente siempre he sentido una gran admiración por las diferentes aventuras de Tintín y Milú, pero a decir verdad siempre terminaba leyendo los tebeos de Astérix y Obélix porque estaban traducidos al gallego. Saludos y gran entrada!
A mí me encantan Ásterix y Óbelix; pero esos son súper escasos por aquí! Que dicha para ti, que los podías disfrutar; y además en gaélico.
La verdad es que hay muchas traducciones al gallego tanto de textos más clásicos como de autores más actuales, en esos no nos podemos quejar. Saludos!
¡Que dicha! Eres muy afortunado, y me alegra mucho ver que respeten, estudien y difundan tanto el gallego!
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