Cuando nos recomiendan un libro

Recomendar un libro, ¡vaya una labor difícil! Francamente, me parece más sencillo recomendar una persona para un empleo; o cumplir labores de casamentera o relacionista pública. Tres labores que son, para mí, muy difíciles pero en modo alguno más complejas que recomendar un libro.

Hablar de un libro –bien o mal- es una muestra de cómo fue nuestra experiencia con el autor; de nuestra propia experiencia como lectores y de lo estudiosos que somos en el ramo del que trata el libro; como para poder contrastar la información que en él ofrecen frente al conocimiento. Muestra de eso fue cuando recibimos la semana pasada un ejemplar del libro llamado “Family Trusts” de James E. Hughescomo regalo/guía por parte de nuestros asesores.

Casualmente, había leído dos capítulos del libro (compartidos por una de mis colegas en la oficina) en preparación para la reunión principal de estos días; así que no sólo puedo decir que ya conocía un poco de él, sino que tengo un abrebocas para su lectura. Los encontré muy pertinentes y, aunque tratan de un tema técnico, muy amables con el lector. Hacen uso de un vocabulario sencillo y de historias y anécdotas, para que el lector pueda identificarse con los temas del libro, e identificar de forma más sencilla cuándo se presentan las circunstancias que menciona el autor en la vida real.

Muy pronto estaré informando más; apenas lea el libro completo!

This entry was published on November 18, 2017 at 10:59 am and is filed under Lectura. Bookmark the permalink. Follow any comments here with the RSS feed for this post.

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s

%d bloggers like this: